30 durante una movilización y despliegue del aparato represivo del Ministerio de Seguridad, dirigido por Patricia Bullrich.

En medio de lágrimas, Morales expresó su incredulidad y angustia, llamando a los atacantes 'hijos de remil puta' y 'sinvergüenzas'.

Lamentó profundamente lo ocurrido y manifestó su deseo de un país en paz, libre y respetuoso.

Concluyó diciendo que lo que le pasó a él podría haberle pasado a cualquiera y que espera que nunca vuelva a ocurrir algo similar.

Espero que esta versión más detallada sea de ayuda.

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