La actualidad ha tomado protagonismo en la programación televisiva.

Rellenando el hueco dejado por el programa de Dani Martínez, el formato de Risto Mejide ha apostado valientemente por uno de los temas del momento.

El canal de Mediaset emitió un especial sobre el caso y se ha volcado en él, analizando al detalle a la Pía Unión y la verdad sobre Pablo de Rojas y el cura coctelero.

En medio de este embrollo y polémica, ha vuelto al foco mediático otro nombre muy popular: el de José Apeles Santolaria de Puey y Cruells, más conocido como Padre Apeles.

Desde este fin de semana, muchos medios han informado sobre la llegada de este hombre a nuestro país, únicamente para colaborar en el programa especial de Risto Mejide.

Con tanto ruido en la televisión, muchos se han preguntado quién es esta persona y cuál es su relación (si es que la tiene) con la historia de las monjas de Burgos.

José Apeles Santolaria de Puey y Cruells, de 57 años, es un personaje mediático español que ha ejercido diversas labores como sacerdote, abogado, presentador de televisión y comentarista.

Estas ocupaciones han sido cuestionadas por el entorno eclesiástico y han llevado a la opinión pública a preguntarse si es realmente un cura.

Lo cierto es que, más que entre misas, la carrera de este barcelonés se forjó entre platós de televisión.

En los 90 triunfaba en la pequeña pantalla con otros personajes como Leonardo Dantés y en 1997 llegó a tener su propio late night en Telecinco, junto a Rocío Carrasco.

También fue uno de los colaboradores ocasionales de Jordi González en 'Moros y Cristianos', una experiencia que lo lanzó a participar en otros programas, donde se mantuvo hasta 2005.

Otro dato que no te esperabas es que fue comentarista de varios realities.

El Padre Apeles también figuró como uno de los participantes en el debate de 2020, siendo esta su última aparición televisiva relevante, ya que posteriormente protagonizó algunas conexiones puntuales en televisión.

Su paso más reciente por televisión, antes de aparecer en Cuatro, fue en una entrevista que concedió a TV3 en la que habló abiertamente de la enfermedad que padece.

En una entrevista con el diario El Español, el cura hizo una inesperada declaración al confesar en 2019 que se había trasladado a vivir a Roma al no haber más 'saraos' televisivos de los que colgarse y admitió que estaba 'harto del independentismo' en su ciudad natal.

Por lo que se mantuvo en la distancia hasta ahora, que ha vuelto a España para colaborar en el programa de Risto Mejide.

Fue durante una de sus intervenciones en 'Sálvame' donde el cura confesó que en los últimos años sufrió una fuerte depresión por la que, como él mismo decía, rogaba a Dios todos los días irse pronto de esta vida.

'No tenía ganas de vivir.

Tomaba muchos somníferos.

Iba andando y me torcía mucho los pies.

Llegó un momento en que solo tomaba las pastillas', llegó a confesar.

En el año 2012, su delicada salud mental lo llevó a intentar suicidarse con una ingesta masiva de fármacos y alcohol, aunque él no ha querido calificarlo como un intento por quitarse la vida.

Años después de abandonar su papel como colaborador, el Padre Apeles ha vuelto a los platós, concretamente al de Risto Mejide, por un caso especial como es el de las monjas de Burgos.

En este tiempo, se ha estado dedicando a la investigación de archivos históricos eclesiásticos, por lo que el programa lo invitó como una de las fuentes expertas (o no) a la que acudir para dar algunas explicaciones sobre el caso.

Así pues, en relación con el plazo impuesto para que abandonen el convento, el cura ha opinado que, antes de echarlas, hay que 'tratar' con ellas.

En cuanto al falso sacerdote, Pablo de Rojas, su mano derecha, el cura coctelero, Apeles ha sido claro: 'Son un par de pícaros.

El problema es que quieren arrastrar a un grupo de hermanas, algunas con más de 80 años, y jugando con la vida de personas muy respetables.

El documento que presentaron no creo que ni siquiera lo entiendan ni ellos'.