Hace unos años, un partido entre estos equipos pasaría desapercibido para muchas personas.

Hoy en día, el juego es un evento de Hollywood.

Casi 30,000 aficionados se reunieron en el estadio St.

Andrew’s el lunes para el partido de la League One, junto con algunas de las estrellas más grandes del deporte, el cine y la televisión.

Esto se debe a que ambos clubes han recibido grandes inversiones de conocidos propietarios estadounidenses en los últimos años.

La leyenda de la NFL ahora posee una participación minoritaria en el club, mientras que los actores Ryan Reynolds y Rob McElhenney han transformado la fortuna del club desde que tomaron el control en 2021.

Brady y McElhenney viajaron a Birmingham para ver el partido, que el equipo local ganó 3-1.

La pareja, que se había divertido en las redes sociales antes del partido, estuvo acompañada por estrellas como David Beckham y su hijo Romeo en las gradas.

En un momento, McElhenney incluso hizo una videollamada con el copropietario Reynolds, girando su teléfono para que los aficionados pudieran ver con quién estaba hablando.

La inyección de superestrellas ciertamente dio una nueva dimensión al partido y creó una atmósfera febril con el partido transmitido en vivo por Sky Sports en el Reino Unido.

Es inusual que un partido de tercera división tenga un horario estelar, pero los aficionados de Birmingham y Wrexham se han acostumbrado a lo extraordinario en los últimos años.

'Esto es exactamente lo que esperábamos cuando compramos el club, que pudiéramos traer este tipo de energía y emoción a nuestros partidos y realmente crear un ambiente donde la gente quiera ser parte de ello', dijo el presidente de Birmingham, Tom Wagner, a Sky Sports antes de que comenzara el partido.

'Donde la gente en casa pueda disfrutarlo y sentir esa energía.

Habla mucho sobre el atractivo del fútbol inglés tener tanta emoción un lunes por la noche entre dos equipos de la League One'.

El partido en sí ciertamente estuvo a la altura de las expectativas, con Birmingham completando una remontada después de ir perdiendo al principio del juego.

También hubo una tarjeta roja para Krystian Bielik del equipo local, lo que solo añadió al drama.

El resultado fue un despertar brusco para Wrexham, que había estado invicto en la liga esta temporada antes del lunes.

El equipo galés sigue en la cima de la League One, pero parecía tener dificultades contra el poder de Birmingham, que solo fue relegado a la tercera división la temporada pasada y cuenta con un poder adquisitivo superior debido al tamaño del club.

Si el comienzo de esta temporada es un indicio, los dos equipos podrían estar compitiendo por el ascenso la próxima vez que se enfrenten el 25 de enero.

Debido al mayor interés estadounidense, se había sugerido que este partido podría jugarse en los EE.

UU.

este año, pero la liga rechazó rápidamente la idea.

El CEO de Birmingham City, Garry Cook, había dicho que pensaba que sería una 'gran idea' trasladar el partido a los EE.

UU.

algún día, pero admitió que la historia y la tradición del fútbol inglés lo harían muy improbable.

El lunes, la leyenda de la NFL JJ Watt, quien también invirtió en el club de fútbol inglés Burnley el año pasado, dijo que no quería que la nueva ola de propietarios estadounidenses cambiara demasiado el juego.

'La belleza del fútbol inglés es la historia, la tradición, la pasión', dijo Watt en X, anteriormente conocido como Twitter.

'Estos clubes han existido mucho antes de que llegáramos y estarán mucho después de que nos hayamos ido.

Moderniza algunos aspectos que lo necesitan, claro.

Pero no juguemos con lo que lo hace genial'.

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