Claro, aquí tienes una versión parafraseada y con más detalle del texto sobre el juego entre los Dodgers y los Mets:**Dodgers vs.

Mets: Walker Buehler ofrece una actuación vintage mientras Shohei Ohtani lidera la ofensiva de los Dodgers en la paliza del Juego 3 de la NLCS**En el Juego 3 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional (NLCS), el abridor de los Dodgers, Walker Buehler, logró 18 swings fallidos de los bateadores de los Mets en solo cuatro entradas de trabajo, su total más alto en una sola salida desde su última apertura en 2021.

Más importante aún, ni él ni el bullpen de Los Ángeles permitieron una carrera.

Los Dodgers, impulsados por un trío de jonrones, incluido un impresionante batazo de Shohei Ohtani, dominaron el juego.

Buehler, quien alguna vez fue el as impenetrable de un contendiente perenne, es un lanzador diferente ahora.

Las lesiones en el brazo le robaron la mayor parte de tres temporadas y mermaron su confianza.

En 2024, tuvo una temporada irregular durante la cual pasó un mes fuera del equipo para rehabilitar una cadera en un centro de entrenamiento privado.

Aunque se estabilizó hacia el final de la temporada, su selección como abridor del Juego 3 de los playoffs de Los Ángeles se debió tanto a la falta de lanzadores del equipo como a cualquier obvio rebote de su parte.

En su primera apertura de postemporada, permitió seis carreras en una derrota de Los Ángeles.

Con la NLCS empatada a uno y entrando en un Citi Field ruidoso el miércoles, los Dodgers necesitaban que su antiguo as recuperara su forma.

Los 18 swings fallidos de Buehler fueron los más altos en las primeras cuatro entradas de un juego por cualquier lanzador desde Kyle Lohse en 2003.

'No confío en nadie más que en Walker', dijo el veterano receptor de los Dodgers, Austin Barnes, a Yahoo Sports después del juego.

'Su capacidad para, ya sabes, estar presente en esos momentos.

Mucha gente no puede.

Desde que estoy aquí, ha jugado muchos juegos importantes para nosotros.

Y no importa lo que pase al principio de la temporada o cómo se haya sentido, confío en que saldrá y competirá'.

La competencia comenzó temprano en el Juego 3.

En la parte baja de la segunda entrada, los Mets llenaron las bases con un out gracias a dos bases por bolas y un sencillo dentro del cuadro.

Con dos carreras regaladas en la mitad superior del cuadro, Buehler estaba jugando con fuego, dando a los anfitriones una oportunidad para contraatacar.

Pero el audaz derecho se concentró, ponchando a Francisco Álvarez y Francisco Lindor para terminar la amenaza.

Su lanzamiento de ponche a Lindor, una curva de nudillos en cuenta completa que se hundió bajo un enorme swing del superestrella de los Mets, fue vintage Buehler.

Saltó del montículo en una nube de bravuconería, gritando para sí mismo y para nadie y todos al mismo tiempo.

Buehler siempre ha caminado esa delgada línea entre confianza y arrogancia, a veces yendo más allá.

Este es un hombre que prefiere abrir botellas de cerveza con los dientes porque, en su mejor momento, Buehler es arrogante, fanfarrón, sin disculpas.

Un rottweiler con una bola rápida de alta velocidad.

Un géiser de improperios en el montículo y en el registro.

Mejor que tú y muy consciente de ello.

Esa confianza engendró éxito, lo que solo generó más confianza.

Desde 2018 hasta 2021, el audaz derecho tuvo la cuarta mejor efectividad en las Grandes Ligas, detrás de luminarias como Jacob deGrom, Max Scherzer y Justin Verlander.

Durante la carrera de campeonato de Los Ángeles en la temporada acortada de 2020, Buehler fue el as indiscutible del club, la elección obvia para abrir el Juego 1 en cada una de las primeras tres rondas.

En cinco aperturas ese octubre, permitió un total de cinco carreras.

La temporada siguiente, fue aún mejor, ganando un cuarto lugar en la votación del Cy Young con una efectividad de 2.

47 en más de 200 entradas.

Era, simplemente, uno de los mejores lanzadores del mundo.

Luego vinieron las lesiones, como a menudo sucede en esta línea de trabajo.

En agosto de 2022, una segunda cirugía de Tommy John (tuvo una justo después de ser reclutado en 2015) junto con un procedimiento adicional en su tendón flexor.

La rehabilitación de Buehler fue un recordatorio sobrio de que el camino de regreso de la cirugía de codo no siempre es lineal.

Pasaron veintitrés meses, desde junio de 2022, entre aperturas en las Grandes Ligas.

Buehler ha sido sorprendentemente honesto sobre las dificultades de ese proceso, aunque se mostró reacio a clasificar su actuación en el Juego 3 como redención.

Para él, al menos públicamente, fue solo otra victoria en los playoffs.

'No significa mucho más para mí que ganar el Juego 3 de la NLCS', expresó en su entrevista posterior al juego.

'Creo que más adelante, puede significar mucho para mí, pero ahora mismo, voy a disfrutar esta noche y luego prepararme si tenemos que jugar el Juego 7'.

Después de un alto conteo de lanzamientos que limitó a Buehler a solo cuatro entradas el miércoles, el cuarteto de relevistas Michael Kopech, Ryan Brasier, Blake Treinen y Ben Casparius no parpadeó, combinándose para cinco entradas sin carreras.

Los Mets solo lograron tres corredores en base contra los relevistas de los Dodgers.

El profeta de la postemporada, Enrique Hernández, agregó un jonrón de dos carreras, su 15º en los playoffs, para proporcionar algo de colchón en la sexta entrada.

A partir de ahí, el juego parecía destinado a una conclusión olvidable.

Pero Ohtani no lo permitió.

En la octava entrada, con dos corredores en base, el dos veces MVP silenció a la ya tranquila multitud con un impresionante jonrón al nivel superior.

El jonrón llevó la línea de Ohtani en los playoffs con corredores en base a un absurdo 7 de 9 con dos jonrones.

El swing de Ohtani también hizo que los descontentos fanáticos de los Mets comenzaran a salir del estadio.

Para la parte baja de la octava, la parte inferior del Citi Field estaba salpicada de asientos vacíos que reflejaban las luces del estadio.

Era una imagen extraña.

Desde la ahora infame reunión del equipo que precipitó un histórico cambio de rumbo el 30 de mayo, los Mets tenían un récord de 27-5 en juegos nocturnos en casa.

Ver a este equipo perder en este escenario se sentía raro por sí solo.

Las apuestas solo aumentaron la decepción.

Pero tan mal como fue para los anfitriones, queda mucho de la serie.

Nueva York enviará al montículo al astuto zurdo José Quintana, quien ha estado sobresaliente durante casi dos meses.

Los Ángeles contrarrestará con el emocionante japonés Yoshinobu Yamamoto.

El miércoles, sin embargo, todo se trató de Buehler, quien ahora es segundo en la historia de los Dodgers en aperturas de playoffs, solo detrás de Clayton Kershaw.

Existe una pequeña posibilidad de que el Juego 3 haya sido su último.

Buehler es agente libre este invierno, y un regreso a Chavez Ravine está lejos de estar garantizado.

Sin embargo, tres victorias consecutivas de los Mets parecen improbables, alineando a Buehler para el Juego 7 de la NLCS o una apertura en la Serie Mundial.

Cualquiera de las dos sería otra oportunidad para continuar reescribiendo su historia.